lunes, 28 de abril de 2008

El mundo está loco,loco

Cada día el mundo parece estar más lleno de psicópatas y desequilibrados mentales. Hace días saltó a la prensa internacional la noticia de que un austriaco de 73 años ha tenido encerrada en el sótano de su casa durante 24 años a su propia hija, de la que durante ese tiempo ha abusado y con la que incluso ha tenido 7 hijos (uno murió al poco de nacer). Lo más impresionante de todo esto es que durante todo ese tiempo, la esposa del anciano ni siquiera sospechaba que su hija. supuestamente desaparecida, se encontraba en realidad en su propia casa. Tanta atrocidad durante dos décadas y nadie se había percatado de nada. Este caso ha llevado a recordar el de Natascha Kampusch, la joven austriaca que estuvo secuestrada durante ocho años por otro depravado.
Y es que viendo todos estos casos, a uno le da por pensar: ¿Cuándo se ha vuelto el mundo tan loco?¿Cuándo ha perdido la gente la cabeza?


Es asombroso que en pleno siglo XXI se sigan viendo este tipo de cosas. En realidad lo malo no es que ocurran, es que nadie se de cuenta de nada. En todos los casos de secuestro o asesinato como estos, la gente que conocía a los malhechores comenta que eran personas perfectamente normales. Hasta ahora sólo se han dado dos casos conocidos en los que los criminales suponían un peligro para su entorno y la gente lo sabía. Curiosamente se han dado en España. Por un lado está el hombre que hace semanas decapitó a su madre y decidió pasear su cabeza por el pueblo mientras mascullaba “La he 'matao'... ahora estás callada, te quiero mucho". La policía encargada del caso apunta a que el asesino ya tenía varias denuncias por malos tratos a su madre.

Otro caso aún más espeluznante es el de la pequeña Mari Luz, la niña de Huelva que fue asesinada por un depravado que ya había intentado secuestrar a otra niña e incluso había sido juzgado por abusar de su propia hija. La justicia no hizo nada para encarcelar a un tipo como este y las consecuencias están ahí.

Todos estos psicópatas son pasto de enfermedades mentales, de taras que no les dejan ser normales, pero no por ello son menos culpables de los actos cometidos. Está demostrado científicamente que cualquiera de nosotros podría perder la cabeza en cualquier momento y hacer una barbaridad, y visto lo visto no es de extrañar. El mundo cada día tiene una actividad más frenética y eso está acabando con todos nosotros; si no, ¿por qué gente como esta anteriormente mencionada o estudiantes como los de Columbine iban a decidir hacer actos como los que cometieron?

Deberíamos relajarnos un poquito más, ser más conscientes de las cosas que hacemos o dejamos de hacer y desde luego, empezar a vigilar a toda persona de nuestro alrededor, no sea que un día a alguien se le crucen los cables y ocurra una barbaridad. Todo puede pasar.

1 comentario:

Unknown dijo...

¿Sólo dos casos, y en España?... Nah, lo dudo. Manipulación de la información e interés selectivo... ¡Hay que leer y escuchar diferentes fuentes, y ampliar la perspectiva!