Carné por puntos

Aunque mucha gente lleva trabajando desde comienzos de esta semana, ahora que a todos los que aún estábamos de vacaciones también se nos acaban, es hora de hacer balance y como siempre esta reflexión nos lleva a las carreteras. Esta semana santa, parece que gracias a medidas como el carnet por puntos, la mortalidad ha descendido en nuestras carreteras. De los 103 muertos que hubo en la pasada semana santa, se ha pasado a 61 muertos, que aunque siguen siendo un número potente, marcan una diferencia en cuanto a otros años.
Parece ser que la llegada en los últimos años de medidas más fuertes contra los conductores y campañas más agresivas de la Dirección General de Tráfico para sensibilizar a la sociedad están empezando a dar sus frutos.

Aun así, aunque las medidas tomadas por el gobierno estén empezando a tener efecto, habría que reflexionar sobre lo que realmente hay que cambiar para conseguir unas carreteras más seguras. El castigo hacia los conductores imprudentes no es más que eso, un castigo. Es necesario hacer ver a los conductores que lo que se necesita es una buena educación; no podemos estar toda la vida castigando al que actúa mal y dando una galletita al que conduce bien como si fuéramos perros. Tiene que salir de nosotros mismos intentar ser mejores y más consecuentes conductores. Sobre todo, esto debería ser aplicable en los jóvenes. Muchos conducen como locos, a toda velocidad, incluso bebidos y drogados, sin pensar en las consecuencias. Cierto es que no todos los jóvenes son así, también los hay responsables y consecuentes, lo que pasa es que abundan más los del otro tipo. La mayoría de víctimas mortales en accidentes de carretera son jóvenes y eso es algo que debería parar.

Con el carnet por puntos, algo que desde luego debió haber sido aprobado antes, parece que se está empezando a ganar la batalla contra las carreteras y los conductores irresponsables. La verdad es que un accidente siempre puede ocurrir, pero si la gente conduce más responsablemente, ocurrirán con menos frecuencia. Ya se sabe, hombre precavido vale por dos.