domingo, 2 de marzo de 2008

Superman

Se dice que el ser humano es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra, que es el único animal que no preve una catástrofe. Es posible pero pocos animales son capaces de llevarlo todo al límite, encararse a la muerte y ofrecerle una sonrisa.
Un mejicano sobrevivió ocho días en el desierto con dos galones de agua. Fue montado a caballo durante 35 millas hasta que el animal murió. Luego el hombre caminó 100 millas a 39ºC hasta que encontró ayuda. Perdió un 25% de su peso corporal y su pelo se había quedado gris. Es increíble como alguien puede sobrevivir ocho días con tan poco agua, tanto calor y tanto camino que completar. Con una perdida del 10-12% del peso corporal le boca se seca, las glándulas salivares se detienen, se camina con torpeza pero no cesan las ansias de supervivencia de este humano.
Antes de que esto ocurriese muchos médicos negarían la posibilidad de que alguien pudiese completar semejante proeza. El ser humano suele morir al alcanzar el 10 en la escala del dolor. Pero parece ser que este mejicano no había oído hablar sobre dicha escala.
Pero ese no es un caso aislado. En las olimpiadas de Melbourne un tal Ron Clarke fue el atleta elegido para encender la antorcha olímpica. Por desgracia, la antorcha estaba sobrecarburada con magnesio y una pequeña cantidad de este producto se derramo en su brazo mientras se dirigía a encender la antorcha olímpica. Sin mediar palabra, continuó su trayecto mientras el brazo se le estaba quemando hasta que cumplió su objetivo. Después estuvo el resto de la ceremonia recibiendo atención médica. No creo que ninguno humano ordinario de nosotros subiésemos seguido este ejemplo, como mucho habríamos dejado la antorcha en el suelo en vez de tirarla.
Es verdad que son cada vez menos las personas que sobreviven a las situaciones límite. ¿Nos estamos haciendo más blandos? En esta sociedad "de la tecnología" todo nos viene bien cocinado y troceado a la mesa, para que solo nos quede comer. Todo es tan sencillo que son pocas las complicaciones que nos surgen y aún menos las complicaciones físicas. Es muy posible que por esto cuando nos involucramos en una situación de vida o muerte llevemos nuestros sentidos y capacidad psicológica hasta punto inverosímiles pero las comodidades de hoy día reducen nuestras capacidades. ¿De donde salen esas ansias de supervivencia de la gente?¿Un sexto sentido? Lo que esta claro es que como sigamos haciéndonos cada vez más vagos acabaremos perdiendo esta habilidad que posiblemente hizo que nuestra especie se pusiese en cabeza de la evolución para convertirnos en indefensas ovejas.

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