Vuelta a la rutina

Es inevitable que después de un periodo vacacional (por muy corto que sea) a todos nos cueste volver a la rutina: estudiar, trabajar… Esta claro que todos disfrutamos estando de vacaciones, ya que estas nos ofrecen la oportunidad de disfrutar de nuestra familia, amigos, tiempo para una misma, oportunidad para viajar fuera y que la vuelta nos produce mala gana e incluso cierta tristeza. Como consecuencia son muchas (y cada vez mas) las personas que sufren depresiones en estas épocas del año, por eso los psicólogos lo han catalogado como 'síndrome postvacacional’.

Los síntomas más comunes de este tipo de depresiones son el insomnio, la dificultad para concentrarse en los quehaceres diarios y el estado de ánimo irritable que estas personas sufren. Todo esto muestra el estrés que provoca el cambio de un estado de completa relajación a otro que nos obliga a realizar grandes esfuerzos. Esta es la razón por la que hoy en día en muchas empresas cuentan con psicólogos que ayudan a sus trabajadores a mantener la calma y a controlar sus emociones.

Las personas que sufren el llamado 'síndrome postvacacional’ suelen estar insatisfechas con el trabajo que realizan o incluso no les gusta su empleo. Ya que pienso que para una persona que realiza una labor de su agrado no es tan duro volver a la rutina. Con esto no quiero decir que haya personas que no esperen ansiosas estas deseadas vacaciones, solo creo que gran parte de la gente que sufre depresiones de este tipo, además de lo anteriormente nombrado sufren frustraciones en otros aspectos de sus vidas.

La vida es un camino irregular en el que sufrimos altibajos continuos, por eso pienso que hay que tener la suficiente dureza y madurez como para aguantar estos cambios que nos vienen encima una y otra vez. Si no tratamos de mantener cierta regularidad en nuestro estado de ánimo es cuando sufrimos las depresiones de las que hablamos. No creo que nos beneficie volver al trabajo y precisar de ayuda de un psicólogo para lograr el equilibrio necesario, puesto que de ser así cuando nos suceda algo por el estilo en nuestra casa necesitaremos a estos profesionales las 24 horas del día. Por lo tanto más nos vale tratar de controlar los aspectos de nuestro estado de ánimo.

También es cierto que hay personas que tienen un carácter más débil y que les cuesta afrontar lo que la vida nos depara, o que simplemente no saben como afrontar los problemas que les surgen. Por eso es necesaria la existencia de profesionales que sean capaces de reforzar el carácter de este tipo de personas. Pero solo deberíamos acudir al psicólogo cuando la situación es realmente crítica y después de empeñar todos nuestros esfuerzos en superar nuestros problemas.
Todo el que sufra por la vuelta a la rutina le diría que se acuerde y de gracias a que tiene un trabajo o, en nuestro caso, la oportunidad de tener una educación. Por lo tanto desde aquí animo a todas aquellas personas a las que les haya costado recuperar el ritmo de trabajo y estudio. Solo nos queda pensar que en cuestión de 2 meses estaremos en verano; con todas las vacaciones por delante para poder disfrutarlas.